Los tiempos cambian, las modas cambian, y las exigencias de estos tiempos van cambiando también. Primero el vestido, la torta, después la fiesta en el salón, el vals y... y ahora la tapa de revista?
Todo era muy previsible. La única moto, y el único perro ("guardián de la paz playera"); la ecuación cerró sin más. A favor del can: a la playa hay que ir a pata muchachos!